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jueves, 10 de junio de 2010

(Bariloche) Cartas de lectores: Creemos en la participación ciudadana y en la construcción colectiva

Laura Ferman

Durante los últimos días, a tomado estado público un conflicto existente entre los vecinos del barrio Villa Llanquihue y un sacerdote de la iglesia católica local.

El sacerdote Gustavo Brianese, respaldado por el obispo de Fernando Maletti, manifiestan haber conseguido en calidad de donación, al obispado de Bariloche, dos terrenos ubicados en el barrio en uno de los cuales se ubica la capilla y en el otro se encuentra situado el Centro Comunitario.
Puede el lector no necesariamente informado, no encontrar hasta aquí razones aparentes para un conflicto.
El barrio Villa Llanquihue, se encuentra ubicado en el Km. 23 de la Avenida Bustillo,
El lugar en donde hoy se asienta el barrio, es un loteo realizado alrededor de los años 40, que fue vendido sin los servicios básicos (agua, luz, gas, etc.) pero, quienes adquirieron los lotes en ese lugar, como ocurrió en numerosos lugares de la ciudad, no tomaron nunca posesión de los mismos. Con el transcurso del tiempo el lugar se fue poblando de familias de las más diversas procedencias.
Muchos de quienes hoy habitan Llanquihue, lo hacen desde 40 o 50 años aunque también muchos otros han llegado en la última década. Actualmente viven allí alrededor de 190 familias
En el transcurso de los años 2006 y 2007, que se juegan dos "batallas" trascendentes para la vida del barrio y para la incipiente organización.
Era necesario pensar en alternativas que permitieran comenzar un serio e inclusivo proceso de regularización dominial que contuviera a todos los vecinos del barrio, que presentaban diferentes situaciones en cuanto al dominio de sus tierras. También se vislumbra como necesaria la figura de la Junta vecinal, que vendría a formalizar el proceso organizativo que el barrio venía llevando adelante desde hacía años. En junio del 2006 y con el efectivo apoyo de lo que en ese entonces era la Dirección Municipal de Tierras y el acompañamiento de otros actores convocados para colaborar y con la activa participación de los vecinos del barrio, se firmó el Acta-Acuerdo para comenzar a trabajar en comisiones en la construcción de la ordenanza 1704-CM-07 que fue sancionada en abril de 2007 por el Consejo Deliberante local. En septiembre del mismo año fue aprobada en 1ª vuelta y Sancionada en noviembre la ley Provincial 4237, en la Legislatura de Río Negro.
La Ley Llanquihue prevé regularizar la situación dominial de todos los vecinos del barrio a través de los mecanismos legales previstos: Juicio de Usucapión, Ley 24.374 (Pierri) o, para quienes no puedan realizarlo por ninguno de esos medios, la expropiación.
El Centro Comunitario "?Templo de la Palabra?"
El centro comunitario, espacialmente ubicado en el centro del barrio, junto a la capilla y a la plaza del barrio, es el lugar de encuentro, discusión y toma de decisiones de todo el barrio.
Una vez por semana atiende el equipo de salud del centro Periférico Madre Teresa. Además funciona allí, de lunes a viernes, por las tardes el Centro Infantil, que recibe a niños de dos a cinco años y está atendido por docentes de Caritas.
También una vez por semana se acercan al lugar el equipo técnico y promotores del CAAT 10, del municipio. Otro día de la semana es destinado a la reunión de los jóvenes del barrio con un promotor municipal.
Los prestatarios del "Banquito de la buena Fe" tienen reunión en el centro también .Cada 15 días, los sábados, los vecinos se reúnen allí en asambleas barriales, ámbito máximo de información, discusión y toma de decisiones de la Junta vecinal. Y una vez por semana la comisión directiva de la Junta. Los festejos barriales, fechas especiales (día del niño, fin de año, etc.) logros conseguidos son celebrados también en este espacio. Esto, entre otros tipos de encuentros que el barrio va generando.
Con profunda tristeza asistimos durante estos días a observar como una vez más sectores realmente "reaccionarios" de la iglesia católica, con actitudes lamentables generan divisiones y disputas al interior de un colectivo.
Observamos como toda una parte del barrio es tomado de "rehenes" al tener que salir a enfrentarse con sus vecinos para defender la reapertura del jardín del barrio al que muchos envían sus hijos, que fue cerrado durante la semana pasada, bajo denuncias al menos dudosas, de amenazas y violencia.
Observamos como vecinos y familiares de un mismo barrio, que han sabido soñar, construir, trabajar, celebrar y luchar juntos, se encuentran enfrentados, renovando en la disputa antiguos recelos que parecían atenuados por el transcurso del tiempo: nacionalismos filo xenofóbicos, fanatismos religiosos, todas las diferencias que Llanquihue con el tiempo parecía haber transformado en "rica diversidad", vuelven a ponerse sobre la mesa, generados por una institución que se arroga la promoción de valores humanos, como la fraternidad, la solidaridad, la comprensión, el amor, etc.
Los "logros" que esta organización a conseguido definitivamente no se limitan a construir marcos legales que respalden su "lucha" por el derecho a un mejor hábitat para su barrio. Reconocido es el impacto que tiene la organización como actor social y político en el ámbito local. No podemos restar mérito a la incidencia de la organización barrial Llanquihue, si tomamos en cuenta la relevancia de los procesos emancipatorios personales y colectivos que los vecinos van experimentando.
El ejemplo que Llanquihue nos trasmite, es sin lugar a dudas, un modelo para observar, y una experiencia de organización y gestión a multiplicar. Desde los esforzados intentos de construir en el respeto por la diversidad de credos, de procedencia, políticas, de profesiones u ocupaciones; desde su conciencia solidaria, ambiental y política la organización barrial si, nos ha dado pruebas genuinas y palpables de construcción colectiva.
Nuestra solidaridad con esta organización y nuestro deseo profundo de que TODOS los vecinos puedan volver a "mirarse" en la convicción de continuar caminando juntos.
Fuente: anbariloche.com.ar

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