Ayer domingo 20 de agosto se celebró el día del niño en Argentina y en otros países como Perú. Debería ser un momento de gratitud y reflexión también por todos aquellos niños que pasan necesidad en el mundo.A pesar de que la ONU celebra dicho día el 20 de noviembre en conmemoración a la Declaración de los Derechos del Niño en 1959, varios países tienen definido un día especial del año para hacerlo. El día del niño es un momento especial para la introspección y abrir nuestros corazones a la solidaridad hacia aquellos que más lo necesitan. Millones de niños al año pasan hambre y mueren a causa de desnutrición y enfermedades, o víctimas de catástrofes naturales. Nosotros como adultos podemos hacer mucho por ellos y para su futuro.
Es necesario que abramos nuestros corazones hacia el otro. La donación y la asistencia a los niños necesitados no solo debería ser un acto de un solo día al año, sino una responsabilidad como hermanos que compartimos este planeta. En Argentina no solo hay niños que mueren de hambre sino que atraviesan diariamente situaciones de violencia, maltrato, drogadicción, abandono, etc. Es trabajo de toda la comunidad y principalmente de las personas que forman parte del gobierno y que por lo tanto han sido elegidos bajo la confianza que el pueblo les ha depositado, hacer de sus vidas una mejor.
Fuente: impre.com
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