La Cruz Roja denunció la masacre de 800 personas en Costa de Marfil

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Por Abiyan. Dpa Y Afp

Fue el martes en una ciudad. El país hace 4 meses que vive un grave conflicto.
El conflicto en el que se ha sumergido Costa de Marfil desde las elecciones del pasado noviembre llegó ayer a uno de sus momentos más álgidos. Mientras las Fuerzas Republicanas (FRCI) del nuevo presidente electo Alassane Ouattara arribaron a la capital financiera del país, Abiyán, y rodearon el palacio presidencial –donde estaría enclaustrado el ex presidente, y perdedor de los últimos comicios, Laurent Gbagbo, quien se rehúsa a abandonar el poder– la Cruz Roja Internacional (CICR) denunció que tan solo el martes mataron a 800 personas.


“Al menos 800 personas murieron en Duekoué (Oeste) el martes pasado,” declaró ayer al cierre de esta edición Dorothea Krimitsas, vocera del CICR en Ginebra.

La disputa entre Ouattara y Gbagbo lleva cuatro meses , pero parece estar sufriendo sus instancias culminantes. El primer ministro de Ouattara, Guillaume Soro, había anunciado el jueves un ultimatum para que Gbagbo traspase el mando pacíficamente, con vencimiento a las 19 de aquel día. Pero la respuesta deseada no ocurrió, y las tropas aliadas a Ouattara emprendieron su avance definitivo hacia el interior de Abiyán, aunque la ofensiva de las FRCI ya había sido puesto en marcha el lunes y para el jueves ya había logrado conquistar la capital Yamusukro, y la ciudad portuaria de San Pedro.

Se estima que, en este momento, las FRCI controlan todo el territorio marfileño, inclusive las zonas del norte, bastión de los fieles a Gbagbo desde que Costa de Marfil se partió en dos tras la guerra civil que se extendió del 2002 al 2007.

Si bien la comunidad internacional apoya a Ouatarra, y se han escuchado con particular insistencia los reclamos de Estados Unidos y Francia hacia Gbagbo para que este reconozca su derrota, la ONU denunció “graves violaciones a los derechos humanos” de parte de las tropas de Ouatarra , las FRCI.

Rupert Colville, Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, enumeró “saqueos, extorsión de fondos, secuestros, detenciones arbitrarias y malos tratos a los civiles”. Por la frontera con Liberia se está efectuando un éxodo masivo: 100.000 marfileños ya habrían fugado hacia ese país. Muchos de ellos temen una reanudación de la guerra civil que concluyó hace tan solo cuatro años.

Mientras tanto, en Abiyán, la población permanece encerrada en sus casas, mientras las FRCI intentan hacer cumplir, a la fuerza, el resultado de las elecciones de noviembre. Se presume que Gbagbo está recluido en su residencia presidencial, en el lujoso barrio de Cocody, entre los pocos focos que todavía domina.

Pero Jean-Marc Simon, embajador de Francia en Costa de Marfil, aseguró que Gbagbo no se encuentra allí.

Fuente: clarin.com